Y a la Virgen María le decimos:
Oh Dulce Corazón de María, sé la salvación mía.
AMBIENTACIÓN:
Los libros nos cuentan historias. Sólo hay un libro que transforma al
que lo lee que es la Biblia, la Palabra de Dios.
Esta palabra ha sido
inspirada por Dios que ayudó a las personas que la escribieron. Por eso
decimos que es Dios mismo el que nos quiere decir algo, el que escribe.
LECTURA: (De una carta de San Pablo)
Queridos hermanos:
No dejamos de dar gracias a Dios, porque al recibir la Palabra de Dios que os anunciamos, la abrazasteis no como la palabra de un hombre, sino como Palabra de Dios.
PALABRA DEL SEÑOR...
ORACIÓN:
Señor, que escuchemos tu Palabra como una palabra importante en nuestra vida.
TE LO PEDIMOS, SEÑOR.
Todos estamos contentos porque este año podemos venir al colegio.
¿Recordáis esto del curso pasado cuando estábamos confinados?
Señor, abre nuestros oídos y nuestros corazones para acoger con cariño tus Palabras y que nos transforme como al Padre Claret.
TE LO PEDIMOS, SEÑOR.
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